Educando con Kiyosaki

 "Deberían darse clases sobre cómo manejar el dinero", defienden algunos. Y entre esos que lo defienden estoy yo. Aunque era algo reticente a hacerlo, decidí dar alguna clase sobre el tema. Soy profesor. Podré enseñar muchas cosas útiles; el dinero tenía que ser una de ellas.



 La cuestión es que elegí 2 grupos de Bachillerato y me decidí a explicarles a cierto pensador que tenía una visión distinta sobre el dinero. Ese pensador era Robert Kiyosaki.

 Las explicaciones resultaron complicadas por momentos. Tenía algunos alumnos molestando y otros ignorándome. Varias veces tuve que pedir que se callaran. Cuando me dejaban explicarle la teoría, pude desarrollar los conceptos de activo, pasivo, ingreso pasivo, flujo de dinero... No sé cuántos alumnos realmente prestaron atención a mis explicaciones; confío en que al menos 10 de los 60 alumnos que tuvieron la suerte de conocer "Padre Rico, Padre Pobre" por primera vez.

 Algún alumno ya había dado Economía en 4º ESO, con lo que no todo sonaba a chino. Una alumna incluso habló de invertir en Bolsa como ejemplo de invertir. Lástima que no tirase más de ese hilo. Lo dejé para más adelante y no retomé el tema; recuerdo que les hablé de las empresas en cuanto compañías cotizadas, aunque no me acuerdo si llegué a explicar los dividendos.

 Hubo cierta confusión entre "pasivo" e "ingreso pasivo". Resolví la misma duda varias veces. Espero que me entendieran. Obviamente, les dije que una casa era un pasivo, salvo que la pusieran para alquilar (como la casa de la playa, por ejemplo). No se me olvidó señalarles con un ejemplo muy gráfico qué era lo más importante para alguien que ganara mucho dinero. Me refiero a que les escribí en la pizarra:

 ¿QUIÉN ES MÁS RICO?

                        PERSONA A                                                                    PERSONA B

                  Ingresos = 5.000€                                                            Ingresos = 2.000€
               
                  Gastos = 4.900€                                                               Gastos = 1.500€

                  Ahorro = 100€                                                                  Ahorro = 500€


 Todos los que dieron su opinión entendieron que la persona A ganaba menos dinero en realidad, pues ahorraba menos. Dicho de manera más apropiada: era más deseable, para los alumnos, poder ahorrar 500€ que 100€.

 El punto culmen de mis explicaciones sobre Kiyosaki llegaron cuando les puse un vídeo de Youtube. En él se veía a un hombre jugando al Cashflow 101 en español. Lo puse (los primeros 10-12 minutos del vídeo) y les expliqué un poco el funcionamiento del juego. Un jugador era un bombero y otro un médico. El doctor ahorraba el doble (aproximadamente) que el bombero. Pregunté entonces quién de los dos ganaría el juego, o quién tenía más posibilidades de ganarlo. Hubo alumnos que pensaron que el médico; otros vacilaron, pues sabían que el ahorro era importante pero yo antes ya les había dicho que se trataba de alcanzar cierto nivel de ingreso pasivo (el equivalente a tus gastos mensuales), y los gastos no eran los mismos en ambos jugadores.

 "El que haga un uso más inteligente del dinero", dije yo, dando a entender que esa sería la respuesta correcta en general. Ya sabemos que la suerte importa mucho, pero lo omití con fines didácticos.

 Esa partida subida a Youtube me sirvió para comentar una de las decisiones que tuvo que tomar el protagonista del vídeo: le salió una oportunidad de compra que consistía en adquirir una casa de 3 habitaciones y 2 baños sin tener que poner entrada y con un coste de 50.000 dólares; el ingreso pasivo mensual sería de -100 dólares. Algunos alumnos querían comprar, otros vieron claro que era un mal trato. Ciertamente, poder comprar una casa sin tener que poner dinero por adelantado podía ser un buen negocio si luego sacabas un dinero por el alquiler; pero si el ingreso pasivo iba a ser negativo, como ponía en esta oportunidad, malo sería adquirir el inmueble.

 "¿Y si el ingreso pasivo fuera de 100 dólares?", pregunté. La cosa cambió: ya nadie tenía dudas que sería un buen negocio, puesto que llevarse 100 dólares al mes sin tener que poner dinero sonaba muy bien. Cierto es que no todos lo captaron al instante: pensaban que había que poner 50.000 dólares de primeras.

 También pude hablar un poco de fiscalidad y de que no era fácil salir de la "carrera de la rata" (también les definí ese concepto). No obstante, remarqué que el ingreso pasivo sería una renta complementaria que nunca vendría mal.

 Como anécdota, algún alumno me preguntó si el juego Cashflow 101 estaba en móvil. Creo que les dije que sí (hay un juego para móvil, sí: "Capital City"). Otro sugirió jugar en clase al juego. "Se puede intentar", respondí. Y un tercero me contó días después que había jugado al juego en la web de Rich Dad.

 De hecho, en las últimas clases del curso nos pusimos a jugar al Cashflow online, en la web de Rich Dad, la empresa de Kiyosaki. Algo aprendieron, sin duda. Dos alumnas se quejaron de que el jugador que llevaba gastaba demasiado (por ejemplo, "asistir a un Espectáculo Aéreo $120"); ahí aproveché para recordarles que hay que evitar los gastos innecesarios.

 En general el resultado no fue todo lo bueno que me hubiera gustado. Como prueba de ello el hecho de que en un examen les puse una pregunta sobre las enseñanzas de Robert Kiyosaki y menos de la mitad de la hicieron.

 Nada más. Yo ya he plantado la semilla en estos jóvenes. Espero que alguno de ellos aproveche las pinceladas que di sobre Kiyosaki y la libertad financiera. Por cada joven que luche por su independencia financiera habrá una persona menos en el futuro que necesite ser mantenida por el Estado. Todos ganamos, sobre todo ellos.